lunes, 4 de julio de 2016



EXTRACTO DE MI LIBRO "El Ser Universal"

Porque le escapamos a la Felicidad?

Toda la vida sentimos que buscamos insaciablemente el camino hacia la felicidad, pero nos damos cuenta de que en realidad le huimos y escapamos a ella. Y es en ese momento donde la felicidad misma cobra el tinte de Mito Urbano, pues a ella solo la vemos en los cuentos de hadas, historias de amor del cine, y momentáneamente en una sonrisa que se esfuma por alguna u otra razón en el cotidiano que atravesamos en esta experiencia, como los seres que somos vivenciando la vida misma.

Estamos en un mundo dual, con una dualidad constante, la luz y la sombra, son lo que hacen posible la vida, y esta dualidad es permitida por la ley divina de la creación, sin luz no hay oscuridad y sin oscuridad no hay luz… y sin estos dos componentes no hay realidad en esta tercera dimensión donde encarnarnos este cuerpo físico material.

Para que todo haya comenzado, alguna vez ha existido un agujero negro, donde como un bastidor, en el se comenzaron a plasmar las galaxias, pero para que ese agujero negro existiera también alguna vez tuvo que haber una estrella… que se su muerte, de paso a ese punto negro en el Universo que genere vida nuevamente. Como verán el famoso dicho "Que esta primero… El Huevo o la Gallina?"… aquí comienza a tener entidad.

Lo mismo pasa con nosotros, somos seres vivenciando una experiencia de luz, donde debemos conectar con nuestra oscuridad para poder iluminarnos. Este pensamiento un tanto New Age, es la realidad de lo que debemos vivenciar. Ustedes piensen que si esto no fuera así este planeta ya hubiera desaparecido, y Dios, si lo humanizaríamos en su forma, en un simple chasquido y sonar de dedos ya hubiera aniquilado todo. Entonces… Si este Dios, Amor, o como querramos llamarlo, sigue permitiendo esta experiencia, es porque TODO absolutamente todo ES como TIENE QUE SER.

Entonces… Quienes somos nosotros para no reconocer de que esa negrura también nos complementa?.

Al integrar esto en nuestras vidas, al reconocer que realmente somos ambas polaridades, que somos seres de luz vivenciando una experiencia en sombras… en un planeta regido a través de la materia que enceguece al alma realmente al conectar con el amor… estamos integrando lo que debemos iluminar. Y de esta forma, no solo la estamos integrando, sino que además, estamos integrando la posibilidad de que la felicidad sea algo posible y no un mito.

Los mitos, no existen, todo es real, desde el momento que es nombrado, posee una carga de entidad racional, esta realidad, sin lugar a dudas da pie a la verdad del todo existente, una vez que entendemos de que… todos podemos ver, pero que muchas veces preferimos pecar por no videntes en nuestras propias vidas.

Le huimos a la felicidad porque ese estado de plenitud automáticamente en nuestro inconsciente nos conecta con la idea de que nos vamos a morir…

Por que ?

Simple, la felicidad no es posible en este plano.

Mentira!

SI lo es, y pasa a ser posible cuando desmitificamos de que realmente la felicidad viene a través de la iluminación, para dar lugar a a que la felicidad viene a través de la integración de lo que somos en nuestra realidad, en este plano, un plano donde existe el día la noche, el blanco el negro, la luz y la oscuridad… el problema esta cuando nosotros nos queremos correr de esta existencia, y ponernos en el lugar de dioses o ángeles, si así fuera no estaríamos en este plano vivenciando esta aventura, de encarnar un cuerpo material.

Seriamos ángeles, o seres de luz, en un estado absolutamente amoroso, sin la necesidad de padecer todas las oscuridades que padecemos diariamente y que insaciablemente hacemos el esfuerzo desmesurado de iluminarlas.

El equilibrio es lo justo y necesario.

Cuando vivimos un momento de plenitud con una pareja, por ejemplo, y sentimos que encontramos a esa alma gemela, en nos complementa en todos los aspectos, nos sentimos felices, pero automáticamente, buscamos alguna manera o forma de embarrar esa felicidad con sombra, pues es necesaria, inconscientemente, lo hacemos, porque nos criamos en esa dualidad… entonces, buscamos algún conflicto, y luego vivimos en la dualidad del amor y el conflicto, de lo contrario, la relación es demasiado perfecta, y se torna aburrida.

Eso le da vida a la relación, para muchos estos parecerá patológico, pero la realidad, es que este plano, es patológico en su creación, no es un plano amoroso y absolutamente puro, como muchos de nosotros queremos o quisimos plasmar. Y esto no es resentimiento, es realidad.

Al sentirnos felices automáticamente, en nuestro insconsciente sentimos de que vamos a morir, pues la felicidad esta asociada directamente con la muerte, con el paraíso, con ese estado de plenitud, y es por esta simple razón que siempre le ponemos sombra encima, para atarnos a este plano, donde, la sombra es necesaria para que la vida sea posible, pero lo que no nos hemos dado cuenta es que podemos ser felices con esa sombra misma, pues es otro estado de felicidad. QUE también es valido, y no vamos a morir por ello, eso es la mente, que genera ridículos miedos que son autolimitantes, para realmente vibrar en nuestro estado más pleno de luz y de oscuridad en este plano, logrando de esa forma que nuestro ser AME esta experiencia dual, y pueda entender este proceso, y así lograr la FELICIDAD de la 3ra dimensión y encarnación a la cual arribamos.

Todos queremos la historia del cuento de hadas… o ese amor de películas… pero nos olvidamos que para que el Príncipe y la Princesa lleguen a estar juntos debieron pasar primero por todos los contratiempos que una malvada bruja o un maldito rufián les puso en su camino. Eso hace interesante a la trama de la historia… ahora bien, si entramos a un cine o abrimos un libro… y el libro tiene 250 hojas, o un guion donde dice… Y VIVIERON FELICES PARA SIEMPRE.

A ustedes realmente les va a gustar este libro o esta película? Se van a aburrir, y lo van a tirar al fuego para prender la leña en el invierno… Así somos los Seres Humanos en este plano, y debemos aceptar esta dualidad. Para poder entender que la luz y la sombra son procesos necesarios de evolución porque nuestro Ser, nuestra alma, nuestro Ser sin la palabra HUMANO de por medio, debe vivenciar esa dualidad para poder evolucionar vida tras vida a un grado mayor de consciencia divina. aHORA... el dilema esta en REALMENTE quien se da el lugar de tolerar los cotidianos de la bruja o el brujo, y no elegir un bloqueo, o una evasión o un borrón y cuenta nueva en vez de luchar por ese amor que todos anhelan casi mágicamente como algo imposible? Hoy es todo efímero, hoy todo es "boyar" de un destino al otro, sin tener un rumbo concreto en el amor... porque hemos olvidado la raíz principal de ese encuentro que luego de lugar a los niveles de tolerancia y de evolución que implica este plano de consciencia, cuerpo y espíritu.

A esto vinimos a este plano.

Cuando comenzamos a entender esto, la felicidad es posible, pues la felicidad que se plantea aquí es una felicidad dual, de blanco y de negro, y debemos ser tan felices en nuestra solaridad como en nuestra lunaridad… en nuestro estado diurno como nocturno del alma… y ese es el gran desafio.

Ser felices por momentos, en una meditación, iluminándonos con cristales, sahumerios, música de relajación, decirnos todos que nos amamos, recordar esto, pero llegar a nuestros hogares y discutir por una cuenta no pagada, o por un temón familiar, automáticamente nos hace no ser conscientes de la increíble experiencia dual que estamos vivenciando. Pues en esa dualidad también se encuentra la realidad de las diversas dimensiones que estamos habitando continuamente, sin darnos cuenta de que la mitad de nuestras vidas nos la pasamos durmiendo, en un mundo donde todo es posible.

Relaciones en 5ta dimensión, contactos en 3ra dimensión… polaridades contrarias, diálogos mentales, músicas de diversas frecuencias, sentimientos, de amor de ira, todo nos complementa y nos vuelve los seres reales que somos en este plano de evolución.

La única forma de ser felices es aceptar de que para llegar al estado de plenitud debemos pasar por las adversidades que son permitidas por Dios, esas adversidades que hacen interesante la historia misma a narrar luego, sin eso, la historia, sería un fracaso y el "Fueron Felices para Siempre" perdería fuerza, pues… no hay premio… no hay amanecer… sin noche no hay amanecer… no hay crepúsculo. No hay realidad.

Y esta realidad es la realmente debemos integrar, para lograr en ella encontrar nuestra real misión en este plano, ya sea desde el arte, desde el deporte, desde la palabra, la espiritualidad, o lo que fuese, encontrar realmente nuestra misión, en esta 3ra dimensión, porque a eso vinimos como los seres que seremos luego en amor puro, hoy no somos eso, hoy somos la semilla, que debe surcar las adversidades de los climas donde fue sembrada, para ser el día de mañana un fuerte árbol de luz… donde sus raíces se encontraran enraizadas en la sombra que ha sabido transitar, esa sombra, es la tierra energética, que debemos depurar a través de nuestro cuerpo espiritual.

Magicamente, al descubrirnos y reconocernos, todo parece una sátira, pues lo que nos genera sombra hoy, sabemos que es necesario, para que mañana nuestra luz sea aun más fuerte, entendiendo esto, nos damos cuenta de que a más sombra, más luz intensa necesitamos para iluminarla, pues, en este proceso, nuestro SER crece, de manera constante, pues… sabe que su estado REAL es el de luz, pero que la oscuridad en este plano es nuestro gran desafío.

Por ende, bendice cada una de tus oscuridades, porque en cada oscuridad, tu esencia real, de luz crece, se acerca más al amor, hacia Dios, porque amando cada uno de tus lados oscuros, amas lo que para ti como ser de luz, es imposible amar, lo integras, lo bendices y pierde entidad… y de esa forma, a través del amor propio hacia tus propias debilidades, día a día te conviertes en un ser muchísimo más conectado con la realidad.

Atilio Adrían Matteucci

1 comentario:

Yole Reis Pordeus dijo...

Perfecto. La aceptación de que estamos hechos de un todo y que todo esto está formada por el bien del mal de la luz y la oscuridad y por lo tanto da equilibrio y la felicidad lo deseas. ¡Paz de espíritu!